Guía para saber escoger la mejor grúa
14 de enero de 2022
¿Tienes en casa una persona con movilidad reducida? las personas con limitaciones de movimiento pueden necesitar una grúa para que el cuidador sea capaz de moverla sin dificultad o con seguridad. Conoce cómo elegir la correcta para las necesidades especiales de cada paciente.
La movilización de personas dependientes no es tarea sencilla. Sobre todo, en personas mayores con movilidad reducida, ya que habitualmente son usuarios más corpulentos. La movilización manual, no solo es incómoda, tanto para el paciente y el cuidador si no que además, puede ser peligrosa para el usuario mientras trae consecuencias negativas para la salud del cuidador.
Con las grúas para personas dependientes es posible evitar las desventajas que trae la movilización manual. Esta ayuda técnica está destinada a realizar transferencias de personas dependientes o elevar al paciente, mejorando la calidad de vida tanto del usuario como del cuidador. Estas, ofrecen las siguientes ventajas:
- Aumentan el nivel de seguridad del paciente, ya que están diseñadas para evitar cualquier accidente y caída. Las correas sostienen a la persona dependiente de forma segura.
- La movilización resulta más cómoda y sencilla, tanto para el usuario como para el cuidador, ya que el arnés sostiene el peso de manera uniforme. Sin la grúa, el paciente puede sentir dolor e incomodidad, y el cuidador tiene que realizar más fuerza, y en malas posturas. Además, con la grúa las movilizaciones son rápidas.
- Esto nos lleva a que mediante las grúas, los cuidadores no realizan sobresfuerzos evitando el desarrollo de determinadas patologías como por ejemplo, la lumbalgia por sobrecarga.
Si tienes en casa un familiar que no puede moverse por sí mismo porque es dependiente, tiene una edad avanzada o ha sufrido un accidente o enfermedad que le impide o reduce la movilidad, en este artículo te vamos a explicar los diferentes tipos de grúa para personas dependientes y los aspectos a tener en cuenta para escoger la correcta.
Cómo elegir el correcto tipo de grúa para movilizar a personas
Hay muchos factores que tenemos que tener en cuenta a la hora de seleccionar la grúa:
Peso del usuario
Si nos decantamos por una grúa más pequeña con menor capacidad de soporte sin tener en cuenta el peso del usuario, acortaremos la vida útil del producto favoreciendo la rotura del mismo y poniendo en riesgo al usuario.
Todos los tipos de grúas para personas dependientes incluyen una ficha técnica e instrucciones de uso, facilitada por el fabricante. En estos documentos figura tanto el peso máximo soportado, así como las dimensiones de la misma.
Dimensiones de la casa
Es muy importante tener en cuenta el espacio del que disponemos para poder maniobrar con la grúa, así como el ancho de las puertas por donde tendrá que pasar.
Si contamos con muy poco espacio en casa, la opción ideal serían las grúas de techo, aunque para ello es necesario instalar los carriles por los recorridos en los que queremos que tenga acceso, y todo ello encarece el producto.
Utilidad que se va a dar
Distinguimos tres tipos de grúas para personas dependientes en función del uso que vayamos a darle.
1. Grúas domiciliarias, elevadoras o de traslado
Las grúas de traslado, también llamadas grúas domiciliarias, están recomendadas para personas que tienen movilidad muy reducida y se utilizan para trasladar a la persona de un lugar a otro, ya que cargan con el paciente en su totalidad. Pueden ser con estructura o de techo, en cuyo caso deberán de instalarse las guías por el recorrido que quiera hacerse.
Las grúas domiciliarias, pueden emplearse para trasladar a un paciente de la cama al sillón, o del sillón a la cama. Más adelante, te contamos cómo incorporar al paciente en la grúa dependiendo de si el paciente está acostado, o sentado.
2. Grúas bipedestadoras
Este tipo de grúa sirve para bipedestar al paciente, es decir, ponerlo de pie. La estructura de la grúa de bipedestación se compone de un mástil, una plataforma de apoyo en la zona de los pies, dos soportes acolchados para la zona de las rodillas y un arnés que cubre la zona de los lumbares y puede llegar hasta las axilas (no cubre la parte inferior del cuerpo y deja este espacio totalmente libre para poder cambiar el pañal sin ninguna dificultad).
3. Grúas mixtas
Este tipo de grúa para personas dependientes combina la función elevadora con la función bipedestadora. Al contar con ambas posibilidades, el precio del producto aumenta considerablemente, pero es una excelente opción si necesitamos ambas funciones.
¿Cómo se emplean las grúas domiciliarias?
El uso que le demos a una grúa domiciliaria dependerá de si el paciente está acostado, o sentado.
Acostado
- Primero, pondremos al paciente de lado.
- Colocamos el arnés debajo del cuerpo.
- Nos vamos al otro lado de la cama, y giramos al paciente del lado contrario para estirar completamente el arnés.
- Giramos al paciente para que quede boca arriba, y colocamos las bandas inferiores en las piernas.
Sentado
- Bajamos la espalda del paciente para poder introducir el arnés detrás de la espalda.
- Levantamos las piernas, una por una para colocar las bandas inferiores debajo de las piernas.
- Acercamos la grúa y ponemos el lazo de la pierna derecha en el gancho central derecho, y vice versa formando un enlazado cruzado.
- Colocamos los lazos que están al nivel de los brazos en los ganchos que están a los costados, cada uno correspondiente al lado más cercano.
- Empezamos la elevación hasta tener los ganchos a la altura de los hombros del paciente.
- Entonces, enganchamos los lazos en los ganchos grandes de los costados, cada uno en su lado correspondiente.
Proceso de elevación
- Terminamos de cerrar el arnés y acercamos la grúa.
- Dirigimos los ganchos centrales hacia las piernas. El lazo de la pierna izquierda lo ponemos en la parte derecha, y el lazo de la pierna derecha del lado contrario, resultando en lazos cruzados.
- Luego ponemos los lazos de la cadera y los lazos superiores en los ganchos laterales correspondientes a cada lado.
- Presionamos los frenos hacia abajo e iniciamos el levantamiento del paciente.
Traslado a la silla o a la cama
- Una vez el paciente esté incorporado, quitamos los frenos y movemos al paciente a la silla o a la cama.
- Iniciamos el descenso del paciente.
- Retiramos los lazos, empezando por la parte superior, y terminando por las bandas de las piernas.
- Se pone el paciente hacia abajo y se retira el arnés. Con cuidado, lo volvemos a incorporar bien en la silla.
Cómo seleccionar el arnés de la grúa
El arnés para la grúa es otro aspecto a tener en cuenta, ya que sin él no se podrá hacer uso de la grúa domiciliaria o elevadora. La selección del modelo variará en función de:
- Las dimensiones del paciente: Los arneses disponen de tallas, por lo que tendremos que saber las medidas del usuario para encargar la talla correcta.
- Tipo de grúa: La forma del arnés cambia dependiendo de si es para una grúa elevadora o grúa bipedestadora.
- Uso que vaya a dársele: Por ejemplo, si queremos emplearlo en el baño deberemos de decantarnos por un material impermeable. Control corporal que tenga el paciente: En pacientes con poco control cefálico y torácico usaremos arneses con apoyo de cabeza, para tener más superficie de contacto.
En Ortoprono intentamos ofrecer la mejor solución al paciente, realizando una valoración del mismo y teniendo en cuenta todos los aspectos que puedan influir en su compra. Pásate por nuestra tienda de ortopedia online o por alguno de nuestros centros para ofrecerte el producto que más se acople a ti.