¿Cómo adaptar un baño para personas con movilidad reducida?

23 de diciembre de 2020

Baños adaptados
Mobilidad reducida

Cuando tenemos en casa a una persona con movilidad reducida o personas mayores, es muy importante adaptar el baño

Cuando tenemos en casa a una persona con movilidad reducida o personas mayores, es muy importante adaptar el baño de manera que cubra todas las necesidades de la persona afectada.

Es la mejor manera de prevenir incomodidades e inconvenientes cotidianas tanto para ellos como para nosotros.

Además, evitaremos problemas de causa mayor y que se sientan inseguros. Por eso, en este artículo vamos a mostraros cómo adaptar un baño para que pueda ser utilizado por personas con movilidad reducida y que la hora del aseo sea lo más cómoda y sencilla posible.

¿Qué adaptaciones necesita una persona con movilidad reducida en el baño?

En España, se exigen tener 3 requisitos para adaptar el baño para minusválidos. A continuación, te contamos cuales son.

1. Adaptar el lavabo para discapacitados

Si la persona con movilidad reducida va en silla de ruedas manual o eléctrica, usar el lavabo suele ser incómodo, ya que la colocación de este elemento se hace a una altura inadecuada en estos casos.

Por eso la zona del lavabo debe cumplir las siguientes características:

–   El borde delantero tiene que situarse a 80 u 85 cm del suelo.

–   El espacio libre debajo del lavabo debe ser mínimo de 70 a 75 cm.

–   El espacio de acercamiento debe ser de 80 cm.

–   El grifo debe ser tipo palanca.

–   El espejo debe tener una colocación a baja altura, cerca del borde, o ser modulable.

También existe la opción de colocar en el baño un lavabo ajustable en altura para que pueda ser usado por todos los miembros de la familia.

2. Adaptar el Inodoro para discapacitados

 

Usar el WC en muchas ocasiones puede ser complicado, más si la persona tiene problemas de rodillas o de cadera, ya que les cuesta mucho sentarse y levantarse.

Para que ese momento no se convierta en un suplicio debes tener en cuenta las siguientes características:

–   La altura debe ser de 43 o 47 cm, preferiblemente de tipo suspendido.

–   El conjunto del inodoro debe sobresalir de la pared 75 cm para poder acercar la silla de ruedas.

–   La ubicación del inodoro debe ser de 40 cm de la pared lateral, con un espacio de maniobra mínimo de 100 cm desde el eje del inodoro.

–   Tanto el portarrollos como el pulsador de descarga deben estar situados de forma funcional para garantizar la agilidad de uso.

–   Es obligatorio la presencia de un llamador.

Algo que tampoco debemos olvidar es, colocar asideros o barras de baño que ayuden a los usuarios a moverse por el baño, pero en la zona del inodoro deben colocarse asideros horizontales en ambos lados. Lo ideal son barras abatibles, situadas a 75 cm.

Otra opción para el inodoro sería colocar un elevador de WC, que ayuda a tener la medida precisa para el inodoro.

3. Adaptar la ducha para discapacitados

La zona de la ducha debe ser lo más espaciosa y amplia posible, sin obstáculos y accesibles.

Dependiendo de si tenemos plato de ducha o bañera se debe adaptar el baño teniendo en cuenta lo siguiente:

–   El plato de ducha debe estar a ras del suelo.

–   Es recomendable un asiento ubicado a 43 o 47 cm del suelo.

–   Deben estar colocados asideros ubicados a 75 cm mínimo.

Lo ideal en estos casos es tener un plato de ducha en lugar de bañera, ya que es mucho más cómodo, tanto para la persona discapacitada como para los cuidadores.

  • Si dispones de plato de ducha se puede colocar varias opciones como, sillas de baño con o sin brazos, taburetes o sillas de ducha con ruedas.

Las personas en sillas de ruedas podrán entrar a la ducha y con ayuda sentarse en una de estas sillas para poder ducharse cómodamente.

  • Si dispones de una bañera se debe colocar una tabla para bañera, un asiento giratorio o una silla de baño o taburete. Cualquiera de estas opciones asegura una ducha cómoda y segura.Para las personas que quieran darse un baño, los elevadores de bañera son ideales para ayudar a la persona con movilidad reducida a entrar y salir de la bañera sin problemas.

Consejos para adaptar un baño para minusválidos

Además de estos 3 puntos tan importantes, debemos tener en cuenta para una mejor usabilidad para la persona discapacitada lo siguiente:

–   Para facilitar la movilidad es importante colocar una puerta del baño corredera o asegurarnos de que la puerta siempre se abra hacia afuera. Así ante cualquier problema podremos abrir la puerta sin dificultad.

–   Disponer de suelos antideslizantes. Se evitarán lesiones innecesarias y facilitarán la movilidad.

–   Barras de apoyo antideslizantes para proporcionar seguridad.

–   Colocar los accesorios del baño a una altura no superior a 120 cm del suelo.

–   El mobiliario no debe estar incorporado al lavabo para no tener problemas con la silla de ruedas.

Si tienes en cuenta todas estas cuestiones, el baño estará totalmente adaptado para personas mayores o minusválidos y no tendrá ningún problema a la hora de asearse.