Las muletas ortopédicas se utilizan durante los periodos de convalecencia, para rehabilitación o como bastón de uso diario. Las muletas ayudan en la estabilidad de las articulaciones y en la coordinación. Además, reducen el estrés en una articulación o extremidad dolorosa ya que permiten quitar parte o todo el peso de una pierna. También pueden usarse como soporte adicional si se tiene alguna lesión o condición adversa en ambas piernas. Usar una muleta ortopédica para caminar puede ayudar a una persona a estar más seguro e independiente en las actividades diarias y a disfrutar de una salud más plena. Características de las muletas ortopédicas Las muletas se caracterizan además, por las siguientes ventajas: Más seguras que los bastones Una muleta, al llevar el apoyo en el antebrazo, ofrece más seguridad a la hora de caminar que un simple bastón, por lo que son más apropiadas para personas con movilidad reducida o con problemas de salud que puedan afectar a su equilibrio. Regulables en altura Independientemente del tipo de puño, color o material utilizado, una muleta es regulable en altura y, además, puede ofrecer la posibilidad de ser plegable. Diferentes tipos de muletas ortopédicas Hay muchos tipos de muletas ortopédicas, también conocidas como bastón inglés o bastón anatómico. En Ortoprono podrá encontrar el mejor precio de muletas ortopédicas y una gran variedad, para todo tipo de situación. Entre ellas, tenemos: Muletas axilares. Se colocan debajo de los brazos Muletas de aluminio. El aluminio es el material más utilizado por su ligereza y versatilidad. Muletas plegables. también en aluminio, las muletas plegables destacan por su gran portabilidad. Añadir que cualquier muleta es regulable en altura, aunque no en todos los casos la muleta es plegable. ¿Qué debes tener en cuenta al utilizar muletas ortopédicas? Muchas personas, han usado alguna vez una muleta o bastón ortopédico para caminar. La mayoría piensa que sabe usarla, pero hay aspectos básicos e imprescindibles que, tal vez, no haya escuchado nunca. Al usar una muleta ortopédica, debe estar atento a los siguientes puntos: Al regular la altura, el puño tiene que estar al nivel de la cadera. La parte más alta donde apoyaremos el antebrazo, quedará unos 10 cm por debajo de la flexura del codo para que sea lo más anatómico posible. Las muletas se sostienen lo suficientemente cerca del cuerpo para poder empujarlas hacia abajo, pero dejando espacio entre ellas dos para poder atravesarlas sin problemas. Cuando sitúe las manos en los puños, tiene que asegurarse que los codos estén ligeramente flexionados. De esta forma, los codos amortiguarán mejor el impacto de su peso sobre ellos. Mire al frente, no a sus pies, así podrá ver mejor lo que ocurre a su alrededor. Retire cualquier obstáculo que no le permita ver correctamente. Precaución con las mascotas y los niños pequeños que pueden obstaculizar el paso de su muleta sin previo aviso. Especial cuidado con los bordillos y escalones. Puntos a tener en cuenta para una correcta conservación, adquisición y utilización de muletas ortopédicas. Revise el estado de su muleta o bastón anatómico. Recuerde que es regulable en altura y que las gomas tienen que estar limpias y en buenas condiciones para no resbalar. Asegúrese que el puño se adapte correctamente a su mano, utilice el tiempo que sea necesario para su regulación. Si le molesta el codo por el roce, puede poner una protección en el producto. Si aún así le sigue doliendo el codo, consulte con su doctor por si el producto no fuera el más recomendable para usted, ya que la muleta puede no ser la adecuada o estar mal regulada. Debe tener en cuenta el tipo de material de la muleta, especialmente en el momento de su adquisición, ya que el aluminio es el material que ofrece más ligereza. ¿Sillas de ruedas o muletas? Su médico le recomendará muletas solo si su salud se lo permite, ya que es necesario tener buen equilibrio, fuerza y resistencia, de lo contrario, sería más recomendable usar una silla de ruedas. Las sillas de ruedas eléctricas ofrecen un acceso total a cualquier parte sin ningún tipo de esfuerzo, por lo que son ideales cuando la movilidad es muy reducida. Por su parte, las sillas de ruedas manuales, le permite una mayor independencia a la hora de viajar, ya que pueden ser transportadas de forma más cómoda. Algunos ejercicios sencillos dependiendo del alcance de su lesión 1) Si puede apoyar su pierna débil o lesionada: Muévala hacia adelante, casi con las muletas. Empuje hacia abajo mientras levanta la pierna buena, de modo que quede nivelada con la pierna débil o lesionada. Mantenga todo el peso en sus manos y no en sus axilas. Repita. Cuando se sienta seguro, puede mover las muletas y la pierna lesionada al mismo tiempo, luego empuje hacia abajo las muletas mientras pasa entre las muletas con su pierna fuerte, como lo haría en una caminata normal. Ventajas: proporciona una estabilidad excelente. Desventajas: velocidad lenta. 2) Si no puede apoyar la pierna lesionada: Mueva sus muletas hacia adelante, luego empuje hacia abajo las empuñaduras y mueva su pierna fuerte hacia adelante casi hasta las muletas. Recuerde que es mejor formar un triángulo con las puntas de las muletas y el pie porque es más difícil equilibrar si todos se alinean. Cuando su equilibrio es bueno, puede mover su cuerpo entre las muletas y colocar la pierna fuerte frente a ellas, para que pueda dar un paso más grande. Ventajas: la pierna lesionada se encuentra libre de carga. Desventajas: requiere de buen equilibrio. 3) Subir o bajar un bordillo con su muleta: Si está subiendo, suba primero con su pierna más fuerte. Luego, levante las muletas y la pierna más débil o lesionada para encontrarla. Si va a bajar, mueve las muletas hacia abajo primero. Baja con su pierna más débil primero. Luego, baje su pierna más fuerte para encontrarla. Empuje hacia abajo las muletas para mantener el equilibrio y quitar peso de la pierna lesionada. Recupere el equilibrio antes de comenzar a caminar. 4) Para usar tus muletas en las escaleras: Si las escaleras tienen una buena barandilla, puede sostenerla con una mano. Ponga ambas muletas juntas y úselas con la otra mano. Si no hay una barandilla o si cree que no es lo suficientemente resistente, use las muletas normalmente, sosteniendo una en cada mano. Párese cerca del borde de las escaleras. Si va a subir, suba primero con la pierna más fuerte, luego lleve las muletas y la pierna más débil o lesionada hacía ella. Si va a bajar, en primer lugar, mueve las muletas hacia abajo. Baje primero con su pierna más débil, luego baje la pierna más fuerte para alcanzarla. Repita. Cuando alcance la superficie nivelada, recupere el equilibrio antes de comenzar a caminar. Si tiene cualquier duda sobre estos ejercicios propuestos, su fisioterapeuta le aconsejará en todo momento qué técnica es la más apropiada en su caso y qué producto o accesorio se ajusta más a usted. En Ortoprono puede conseguir un bastón anatómico o muleta a un precio muy competitivo. También, podrá ver mucha más información sobre productos y accesorios de ortopedia para la movilidad como muletas, bastones, rampas, sillas de ruedas eléctricas, andadores de rueda con carrito o sin carrito, salvaescaleras. Estos y muchos más productos podrá añadirlos a su carrito de compra y, tras seguir unos pocos y sencillos pasos, ¡estarán de camino a su domicilio! 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