Consejos fáciles para el cuidado de los mayores en verano

El verano es una época de diversión y relax. Y las personas mayores no deben ser una excepción a la hora de disfrutar de los días largos y cálidos. Con el fin de evitar los riesgos de las altas temperaturas, como puedan ser un golpe de calor o la pérdida de hidratación, es indispensable tomar unas sencillas precauciones.

En Ortoprono contamos con soluciones y ayudas técnicas para que los días más pesados del verano sean lo más llevaderos posible.

¿Cuáles son las medidas que podemos tomar en casa?

Mantener el interior de la vivienda fresco. Para ello se aconseja cerrar las ventanas en las horas de más calor y abrirlas cuando la tarde es más fresca. Si hay aire acondicionado, procurar que esté entre los 24 º o 26 º, evitando en cualquier caso que el cambio de temperatura con el exterior sea muy brusco.

Refrescarse a menudo. Para ello, se pueden aplicar paños húmedos o darse duchas frecuentes. Con el fin de evitar riesgos en la ducha, la superficie de la bañera o el plato deben ser antideslizantes y siempre es una buena idea colocar barras o asideros para poder agarrarse a la entrada y la salida. Otra opción es una asiento para ducha que permite refrescarse los pies y las piernas sin necesidad de mojarse por completo.

Es muy importante mantener un buen nivel de hidratación para combatir el calor

Beber mucha agua. La pérdida de líquidos es el efecto más inmediato de las altas temperaturas. Para evitarlo, es aconsejable beber mucha agua. Los vasos con asas permiten beber de manera cómoda y fácil y no se derraman gracias a su tapa. Se pueden tener cerca del sillón o la butaca y dar periódicamente pequeños sorbos para mantener la hidratación.

Vigilar la tensión. En verano hay que ser especialmente cuidadoso con la tensión porque el calor favorece que baje. Por ello es aconsejable disponer de un tensiómetro, que permita controlarla desde casa todos los días sin necesidad de acudir a la farmacia.

Evitar salir de casa en las horas de más calor. Intentar permanecer en casa a partir de las 11:30h y hasta aproximadamente las 17:30h que empiece a bajar la temperatura. Para ejercitar cómodamente durante esas horas las piernas y los brazos, contar con un pedalier será una buena ayuda.

Intentar evitar las comidas muy calientes, consumir mucha fruta y verduras (el gazpacho es el aliado perfecto del verano) y vestir de manera cómoda y fresca, son otros consejos que podemos seguir para el cuidado de los mayores en verano.

¿Qué podemos hacer para prevenir el calor si la persona mayor sale de viaje?

Protección y gafas de sol. Imprescindible una crema solar de alta protección para evitar las quemaduras del sol. Y para cuidar los ojos, unas gafas solares que protejan la vista de la luz intensa.

Procurar viajar lo más cómodo posible. En los trayectos es fundamental ir lo más cómodo posible y si puede ser, echar una pequeña siesta hará más corto el viaje. Para ello contamos con almohadas y collarines de viaje que permiten descansar la cabeza para estar más relajados.

Calzado cómodo y fresco. Es muy agradable pasear en verano, por la tarde, cuando el sol ya no calienta tanto. Caminar con calzado confortable, que permita que los pies respiren como unas sandalias, es una garantía contra el cansancio y el calor.