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Pádel adaptado: accesibilidad

Hace unas semanas el polideportivo Juan Antonio Samaranch de Valencia acogió la segunda edición del campeonato de España de pádel en silla de ruedas, organizado por Ortoprono, en el que participaron catorce parejas procedentes de todo el territorio nacional.

Óscar Agea y Edorta de Anta se proclamaron campeones de España de pádel en silla de ruedas tras disputar la gran final con los valencianos Luis Peinado y Christopher Triviño, revalidando así el título que ya consiguieron en la primera edición disputada el año pasado en Sevilla.

El pádel es un deporte que va ganando adeptos/as año tras año, siendo en la actualidad uno de los más populares. Hoy en día, podemos contar con instalaciones deportivas dotadas de canchas de pádel accesibles para las personas con discapacidad y de un reglamento de pádel adaptado.

Aunque muchas personas no se imaginan que puedan existir diferencias en la normativa entre el pádel convencional y el pádel adaptadado, lo cierto es que sí las hay. La Federación Internacional de Pádel (F. I. P.) es el organismo encargado de la determinación de la reglas del pádel.

Desde las aberturas laterales de acceso a las pistas, que deben tener un mínimo de 1,05 metros para permitir la entrada directa de las sillas, hasta los vestuarios y cuartos de baño: todo cuenta para tener unas instalaciones adaptadas para practicar pádel en silla de ruedas.

Las líneas de la pista, así como las paredes y el suelo, deben llevar colores uniformes y diferentes que hagan suficiente contraste entre sí, siendo los tonos preferentes son el pardo, el azul o el verde. Además, las superficies deben estar libres de cualquier tipo de objeto.

Los accesos deben llevar protección en los laterales y en la parte superior, al igual que las barras de red. El sistema de amortiguación contra golpes puede ser de neopreno o gomaespuma y deber tener un grosor mínimo de 2 centímetros. Además, deben instalarse correctamente al armazón metálico y a las barras, mediante velcros, para no perder su amortiguación con otro material.

En cuanto a la iluminación, las instalaciones deben contar con una altura mínima de 8 metros, con lo cual los proyectores deben ir situados fuera de la proporción vertical de las paredes.

El principal objetivo de estas normas es mejorar el rendimiento de los jugadores en la competición. Gracias al seguimiento de estas reglas y a la colaboración de todos/as, iniciativas como el Campeonato de España de pádel en silla de ruedas son posibles.

¡Os invitamos a participar en la tercera edición de este torneo para 2018!