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Adapta tu casa para los meses de frío

Durante el invierno, pasamos más tiempo en casa disfrutando de las comodidades de nuestro hogar. Por este motivo, tener una vivienda equipada es esencial para el día a día.

Cuando llegan los meses de frío, solemos permanecer más tiempo en casa resguardándonos del mal tiempo, mientras devoramos un buen libro junto a la estufa o pasamos el rato en compañía agradable frente a la chimenea.

Los impedimentos en movilidad de las personas con limitaciones funcionales dificultan su interacción con el entorno y la realización de muchas de las actividades básicas de la vida cotidiana, como los desplazamientos, el aseo, la alimentación, el descanso o el tiempo libre. Por este motivo, es muy importante que dichas personas dispongan de una adecuada distribución de los espacios y un equipamiento del hogar correctamente adaptado a sus requisitos.

La supresión de barreras que limitan la libertad de movimientos de las personas con dificultades, mediante la instalación de puertas anchas, asideros en las paredes para mantener el equilibrio y suelos antideslizantes, así como la adecuación de la altura de los muebles y la reubicación de puntos de luz, interruptores o tomas de corriente, son vitales para mejorar su calidad de vida y crear un ambiente confortable en el que se sientan cómodos/as. Otra opción a considerar son las sillas salvaescaleras, perfectas para poder desplazarse por todo tipo de escaleras, tanto en interiores como en exteriores, de forma fácil y segura.

Las fases del proceso de adaptación de la vivienda de una persona con movilidad reducida comienzan con un estudio de sus necesidades, para determinar las acciones precisas que se deban llevar a cabo. Tras detectarlas, se pone en marcha el proyecto de la reforma y se ejecuta la obra.

El último paso consiste en la instalación del equipamiento. En Ortoprono, hemos diseñado una serie de soluciones para adaptar el entorno de las personas con limitaciones funcionales y cubrir sus necesidades, tales como camas articuladas, incorporadores, mesitas auxiliares con ruedas para la cama o el sillón, cojines antiescaras, cojines lumbares, almohadas cervicales, sillones relax, lavacabezas, asideros o barras de apoyo, banquetas de baño con o sin respaldo, sillas para el WC, asientos giratorios de bañera, elevadores de WC, grúas de transferencia, andadores o sillas de ruedas, entre otros.

Recuerda que adaptar un hogar para permitir que las personas con movilidad reducida tengan autonomía, seguridad y comodidad es muy importante para aumentar su calidad de vida.