10 dinámicas para niños con discapacidad física

Para adaptar las actividades físicas a niños con discapacidad sólo es necesario variar las formas, la complejidad del juego, los objetivos o las reglas para que puedan participar.

Tener una discapacidad física no debe impedir poder participar en juegos o actividades a los niños. Ellas, les proporcionan un medio de participación más estrecho con su entorno y les ayuda a tener momentos agradables en sus ratos libres.

Para adaptar las actividades físicas a niños con discapacidad sólo es necesario variar las formas, la complejidad del juego, los objetivos o las reglas para que puedan participar.

La adaptación de actividades para niños con movilidad reducida es estimulante, y básico para su desarrollo físico y mental.

No obstante, es recomendable pedir consejo a un especialista que pueda guiarte sobre las actividades que mejor puedan funcionar dependiendo del grado de minusvalía del niño/a.

Juegos adaptados para niños con discapacidad física

Los juegos en la infancia ayudan al desarrollo y la preparación para la vida adulta. Son fuente de autoafirmación, motivación, satisfacción e interacción social.

La importancia de la educación física para niños con discapacidad se multiplica, por lo que el juego se convierte en un área ocupacional esencial para su motricidad, desarrollo social, cognitivo, sensorial, perceptivo, afectivo y comunicativo.

1. Cocinar

Enseñar a los niños a cocinar es una excelente actividad que puede hacerse en familia, además, suele gustarles mucho, sobre todo a los niños más jóvenes.

Poder cocinar su propia comida, y posteriormente comérsela es una actividad que favorece tanto su desarrollo mental como personal. Es una buena dinámica para niños con minusvalía y les ayuda a prepararlos para su vida adulta.

2. Juegos de memoria

A día de hoy existen varios juegos que trabajan la memoria a través de diferentes dinámicas que utilizan estímulos visuales y especiales.

Los juegos de memoria con música estimulan la parte auditiva del niño y en muchas ocasiones memorizan antes una canción que les gusta que un objeto dibujado en una lámina. La combinación de estos juegos infantiles fomenta el desarrollo de retención.

3. Juegos de manualidades

 

Hacer diferentes manualidades como cortar y pegar, o hacer impresiones a mano con pintura son algunas de las manualidades que a los niños les encanta.

Puedes usar algunos artículos para el hogar o alimentos, como macarrones o espaguetis, hilos o botones para fomentar el lado más artístico del niño. Este tipo de actividades ayudan a fomentar su motricidad.

4. Equitación

Otra dinámica para niños con discapacidad es la equitación.

Algunos establos ofrecen recorridos guiados por senderos con sillas modificadas y adaptadas que permiten a los usuarios en sillas de ruedas manuales o eléctricas montar a caballo con total seguridad.

Montar en cabello puede ser terapéutico y beneficioso para los niños, ya que la naturaleza fomenta tranquilidad y serenidad.

5. Cursa de obstáculos

Esta actividad se puede adaptar perfectamente a los niños en silla de ruedas. La actividad consiste en derribar objetos durante el trayecto o distintas actividades para intentar conseguir el mejor tiempo posible.

Una dinámica para niños con discapacidad física que fomenta la motricidad y el desarrollo sensorial del niño.

6. Jugar a tierra, mar y aire

Esta actividad física se adapta a los niños con limitaciones en movilidad y funciona de la siguiente manera: el profesor gritará tierra, mar o aire y para cada palabra el niño/a deberá dirigirse a un sitio en concreto.

Si grita la palabra tierra podrá correr por el espacio por donde se esté realizando la actividad. Si grita mar deberá irse a las colchonetas y, por último, si grita aire deberá dirigirse a los bancos e intentar subir las piernas.

Para los niños con movilidad reducida, se sustituirán las acciones como la de levantar las piernas por tocar el banco, al igual que en el caso de las colchonetas, su misión será tocarla lo más rápido posible.

7. El balón gigante

 

“El balón gigante” es una actividad ideal para desarrollar habilidades motrices básicas y percepción táctil. Se puede jugar en grupos de 10 personas. El juego consiste en moverse por la sala y evitar que el balón caiga al suelo.

Los niños en silla de ruedas podrán participar y se debe pretender que en todo momento el niño toque el balón al igual que sus compañeros mientras se va moviendo con la silla o le van moviendo.

8. Juegos de mesa

Los juegos de mesa son un clásico que nunca falla, y en el que todos podemos participar. Además de ser estimulantes a nivel mental, permite a los niños pasar un buen rato para socializar con la familia o amigos.

9. Juegos para ensuciarnos

A todos los niños les encanta ensuciarse. Disfrutan mucho más que si tienen que andarse con ojo a ver si se manchan la ropa o las manos.

Para ello se utiliza plastilina, pintura de dedos, e incluso barro. La actividad es libre y con ella se intenta estimular tanto la parte sensitiva como motora del niño.

10.   Pelota por el embudo

Esta dinámica para niños con discapacidad es muy sencilla y hará que el niño pase un rato divertido. Se trata de colocar 4 bancos suecos que hagan de embudo y con una pelota de tenis deben pasar el mayor número de pelotas entre los 4 bancos al campo contrario.

Gracias a este juego, las personas con movilidad reducida controlarán la postura de lanzamiento, mejorarán la coordinación, fuerza y precisión de los brazos y fortalecerán el equilibrio.